Y cómo confirma la teoría de la bilocación

MATERNAR - 1/3

Sofía y Alvaro fueron de esas parejas que, a kilómetros, identificabas como almas gemelas. Todo en ellos parecía existir en perfecta armonía y simbiosis, y se vio aún más claro cuando se convirtieron en papás. Papás de tres niños preciosos. Ahora no eran 2 riendo de lo mismo, sino 5. Ya no eran solamente la pareja alegre y cariñosa, sino la tribu completa, a quienes lograron permear de una espiritualidad poco común.

Recuerdo haber cuestionado a Sofi a profundidad sobre tantos temas, principalmente sobre la maternidad. Amaba la ligereza con la que aceptaba mis preguntas ingenuas y novatas (ejemplo: “Cómo le hago para que mi hijo duerma?”). Amaba aún más la sabiduría que me transmitía en sus respuestas que, aunque sencillas, estaban cargadas de empatía y de franqueza. Siempre la sentí convencida de sí misma, de lo que venía para ella. Siempre incitó en mi ganas de abrazarla largo y tendido y apretado - sin darme cuenta, al pedirle consejos sobre mamás, ella me maternó a mi.

Después de casi 3 años de luchar contra el cáncer, Sofi falleció a sus 37 años - su cuerpo, al menos. Estoy segura de que su espíritu seguiría luchando por vivir. Y Alvaro, Alvaro la maternó todo ese tiempo. De alguna forma, lograron maternar a sus hijos juntos durante esa batalla, maternarse entre ellos: Ella animando a él, que sonriera, que iban para adelante, que se animara. Y él maternando a ella como sólo un esposo dedicado y enamorado puede hacerlo… su otra mitad, hasta su último aliento.

No se me borra de la mente una imagen de él, hace poco, cargando a sus 3 hijos al mismo tiempo en que se sumergían en un río - cada hijo un ente independiente, pataleando y lloriqueando y Alvaro conteniéndolos, no sólo de no hundirse en el agua, pero de perder la calma ante las corrientes.
Ahora que lo pienso, seguramente se contuvo a sí mismo también.

Pienso mucho en que la teoría de la bilocación (el poder estar en dos lugares al mismo tiempo) la comprueban Sofi y Alvaro, y no a través de espectáculos ni religión… pero a través del ejemplo de espiritualidad y la entrega que practicaron con tanta coherencia durante su vida. Me lo confirmó Alvaro, cuando al preguntarle sobre sus pensamientos en cuanto a maternar, me respondió sobre “el privilegio (y milagro) de tener la oportunidad de educar, de impactar al mundo a través de la educación que pueda darle a mis hijos: ser honestos con ellos mismos, tratar bien siempre a los demás y ser humildes ante todo.”

La bilocación… Alvaro y Sofia y sus hijos podrán estar en distintos lugares, pero en definitiva, están haciendo lo mismo. Tal es la influencia del amor que se tienen, porque al decidir maternar, Alvaro está trascendiendo todo tipo de experiencia humana.

Feliz día de las Madres, Sofi y Alvaro :)

Con todo mi corazón,

-Ana. (Anita para ustedes)

6 comentarios

Que hermosa historia te deja un sabor de boca indescriptible. Cada uno de nosotros maneja su maternar de alguna manera sin tu compañero (a) pero a la vez con El ( Ella ). Es algo hermoso.

América Marianela González Garcia 17 mayo, 2022

Lloré mares.
Excelente ejemplo de personas, pareja y familia 🤍✨

Caro 17 mayo, 2022

Desde que Alvarito sufrió su accidente de muy pequeño hasta ahora , No a dejado de enseñarnos lo que es la realidad de la vida y como debemos de llevarla . Es difícil encontrar como un hijo da enseñanzas de Vida a sus Padres y Alvarito lo a echo a la perfección , Te estaremos agradecidos Siempre tu Mamá y Yo .
Te Queremos y Respetamos Siempre .

GONZALO 17 mayo, 2022

Que bonito articulo, sin duda una pareja ejemplar.

Gonzalo 17 mayo, 2022

Qué bonito relato, pero se me apachurro el corazón!!!! Un sincero abrazo. <3

Deysi 17 mayo, 2022

Que bonito lo describes…me hiciste llorar!!!

Gryxs 17 mayo, 2022

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